Una persona con fiebre alta debe primero quitarse la ropa gruesa que está usando. Dado que la fiebre alta provoca sudoración, se debe preferir la ropa delgada, como camisetas y pantalones cortos, en lugar de la ropa gruesa. Además, la persona con fiebre alta no debe meterse debajo de un edredón o manta.
Además, se deben aplicar compresas frías en la cabeza y las articulaciones. Las toallas mojadas también deben colocarse en áreas como axilas, rodillas y frente.
Si la fiebre aún no ha bajado, puede ducharse con agua a temperatura corporal. Se debe tener cuidado de que el agua no esté demasiado fría o caliente, debe ser la misma que la temperatura corporal.
Si aún no se logra un resultado, se pueden usar píldoras antipiréticas para adultos. Si la fiebre no cede a pesar de estos, debe consultar a un médico.