1. Mantente vigilado -Cuando traiga su conejo a su casa por primera vez, observe cómo interactúa con el medio ambiente. Presta atención a lo que usa para orinar, cómo reacciona ante otras personas en la casa, si juega con juguetes y cómo reacciona en la habitación donde lo pusiste. - No se preocupe si se queda un rato en un rincón. Puede perder el tiempo para adaptarse al entorno, en este caso no debes interferir mucho. - Durante los primeros días, manténgalo en su jaula. Todos los días, siéntese a su lado y háblele de una manera que no lo ponga nervioso. 2. Retirar de la jaula - Si tu conejo parece estar acostumbrado a ti, abre la puerta de la jaula después de asegurarte de que las puertas de la habitación donde se encuentra la jaula estén cerradas. No intente sacarlo sujetándolo, deje que salga por sí solo. - Mientras tanto, puede hacer cosas que no lo asusten, como leer o escribir en algún lugar de la habitación. - Puedes tener verduras cerca para dárselas en caso de que se acerque a ti con una actitud un poco curiosa. 3. Deja que interactúe contigo -Una vez que tu conejo esté fuera de su jaula, déjalo saltar por la habitación como le plazca. No intente que le llegue y no cambie constantemente de lugar. Eventualmente, la atención de tu conejo se volverá hacia ti. En ese caso, deja que te huela. Luego demuéstrale que puedes ser su amigo dándole un trozo de verduras. 4. Deja que tu conejo se acerque a ti cuando quiera - Si no quiere comerse las verduras que le das, déjalas y aléjate. - Quizás después de un pequeño descanso, cuando empiece a comer, puedas ofrecerle más verduras. Entonces, cuando comience a comer lo que tiene, comience a hablarle con calma limitando sus movimientos. 5. Regocíjate desde el principio - Cuando se acerque a ti y comience a comer lo que le ofreces, comienza a amarlo poco a poco desde el principio. Si se queda quieto y baja la cabeza hacia el suelo, continúe acariciando. Si se asusta y se escapa, deja de amar. Sigue de pie en silencio en la habitación. Para volver a acercarte a él, debes esperar pacientemente a que se acerque a ti. - Si te muerde, debes decir en voz alta que duele. De esta manera, sabrá que te está lastimando. 6. No te rindas demasiado pronto Tienes que seguir intentándolo, incluso si hay momentos difíciles. Dale a tu conejo un trozo de verduras de vez en cuando y, a veces, ignóralo por completo. Si se acerca a ti, sigue alimentándolo. -No dejes de probar esto varias veces al día hasta que te hayas unido a tu conejo.